ACEPTAR quienes somos, nuestras circunstancias y aceptar a los demás tal como son, es la puerta de la paz y la felicidad.
ACEPTAR es dejar de ir contra corriente persiguiendo imposibles, frutos de prejuicios y condicionantes.
La ACEPTACION es el final de la rabia hacia nosotros mismos y hacia los demás, es dejar de corroernos por dentro,
La rabia nos impide respirar, nos impide vivir. Marca pautas de tensión constante, hace imposible la relajación y nos mantiene en situaciones de autoagresión, de alerta permanente y de ataque hacia los demás. Bajo su influencia estamos siempre en lucha con nosotros mismos con los demás y con el entorno.
ACEPTACIÓN es permitir conectar con nuestro ser y descubrir nuestros valores.
Al trabajar las emociones de meridiano de “HIGADO”, lo equilibra y mejora sus patologías asociadas y las relacionadas con los Ojos, Tendones y Ligamentos…
ACEPTACIÓN mejora los estados de irritabilidad, susceptibilidad…